Johan deja atrás el dolor de la muerte de Chan-hee. Mi-ho, consumida por la culpa, jura no volver a perder a ningún ser querido y empieza a entrenar en casa de Geum Baek-ju para despertar el poder de Wonjeong. Johan y Van siguen a Mi-ho, pero la observan de lejos para no interrumpir su energía. Mientras, vemos que Gungtan acogió a Yeom-ji, cuyo padre la maltrataba, y que un misterioso grupo lo...