Kerry le dice a Susan que está muy contenta con su trabajo como jefe de urgencias, pero que tendría que agilizar más el servicio porque hay pacientes a los que no les daba tiempo a atender. Susan decide hablar con sus compañeros, que no le prestan demasiada atención. El problema será tomado más en serio cuando aparezcan 35 misteriosos pacientes y una mujer con un cronómetro en la mano... Mientras, Sam y Luka atienden a una muejer mayor que presenta diversas fracturas y dice haber sido violada, y Carter y Abby atienden a una joven que se presenta diciendo que tiene un dolor de estómago y acaba dando a luz en los pasillos.