El doctor Gregory Pratt, la psiquiatra Jing-Mei y un joven pasajero sufren un grave accidente en coche cuando un individuo les dispara y el doctor Pratt pierde el control del vehículo, cayendo al rio Chicago. El rescate es muy dramático y los accidentados tienen graves heridas. Sam, tratando de dar una mejor vida a su hijo, se ha marchado de la ciudad, y Luca trata de encontrarla abandonando el servicio de urgencias. Weaver, ante la entrada inusitada de pacientes, obliga a Abby a tomar posesión de su nuevo cargo como doctora.