A fines del siglo XIX, el brutal terrateniente Seamus Laurent masacra a un clan romaní, desatando una maldición sobre su familia y su pueblo. En los días que siguen, la gente del pueblo está plagada de pesadillas, el hijo de Seamus, Edward, desaparece y un niño es encontrado asesinado. Los lugareños sospechan de un animal salvaje, pero el patólogo visitante John McBride advierte sobre una presencia más siniestra que acecha en el bosque.